¿Qué es la anorexia nerviosa?

La anorexia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria asociado a un trastorno mental, pues cursa con dismorfia corporal. No es exclusiva de mujeres ni de personas jóvenes, aunque parece ser que este grupo de la población es más propenso a sufrir las formas graves de anorexia nerviosa, que pueden conducir a la muerte.

Los psicólogos en Universalud somos conscientes de la importancia de un buen diagnóstico para comenzar el tratamiento, porque no debemos confundir la anorexia nerviosa con otras enfermedades que puedan causar síntomas parecidos, como puede ser una depresión nerviosa en una edad como la adolescencia. Aclaramos que muchas veces la anorexia nerviosa no viene sola o termina siendo la puerta de entrada a otros problemas psicoafectivos como la depresión o la fobia social.

¿Por qué tiene anorexia nerviosa?

No se sabe qué causa la anorexia nerviosa y sería demasiado simple achacar el problema a la presión social a la que se ven sometidos los jóvenes, en especial las mujeres, en cuestiones estéticas. Es cierto que estos factores influyen a algunos pacientes, sin embargo, en otros no se ve esa necesidad imperiosa de ser aceptado o de cumplir con unos estándares.

La anorexia no parece hacer distinción entre personas según el nivel cultural o socioeconómico, aunque la enfermedad hace que el paciente oculte su condición el mayor tiempo posible y hay quienes suelen lograr ese objetivo durante más tiempo si las condiciones son propicias.

Y, a pesar de la relación observada entre anorexia nerviosa y depresión o ansiedad en muchos pacientes, tampoco podemos establecer una relación causa-efecto.

Esto nos lleva a reconocer nuestro desconocimiento, por parte de todos los profesionales de la salud, acerca de por qué algunas personas desarrollan anorexia nerviosa, aunque parece haber factores que aumentan la probabilidad de enfermar:

• Cuando el paciente es joven y parte de un problema real de exceso de peso o bien se ve presionado para mantenerse en ciertos kilos para continuar en una competición deportiva. Esto no causa anorexia nerviosa, aunque a veces pone en marcha toda la maquinaria que termina con una anorexia.
• En entornos donde existe un alto nivel de exigencia, bien sea en el rendimiento académico o deportivo, bien con las expectativas sociales, y a la vez no se da un diálogo fluido, un joven puede ver el control de su peso como lo único que depende de él o de ella, dado que todo lo demás parece impuesto desde el exterior.
• En algunos casos, haber sufrido abusos sexuales en la infancia o durante la pubertad parece ser el detonante de la anorexia en chicas, que reniegan en esos casos de los cambios que experimenta su cuerpo. No son personas inmaduras, sino que un trauma les hace temer verse físicamente como adultos.
• Las personas con problemas importantes en sus relaciones sociales, como puede ser la fobia social o una timidez patológica, no la típica de la adolescencia, pueden llegar a pensar que si no estuviesen obesos o si se parecieran más al perfil de lo que se nos vende como éxito social en los medios, sus problemas de relación con los demás desaparecerían. En estos casos, se debe trabajar la mejora de las habilidades sociales y el manejo de la ansiedad o la baja autoestima, a la vez que se aborda el tratamiento de la anorexia nerviosa, para evitar recaídas.

¿Cómo tratar la anorexia nerviosa?

Dependiendo de la gravedad de la anorexia en el momento de la detección y de su evolución, podemos tratar de manera ambulatoria o necesitar un ingreso hospitalario inicial para estabilizar la parte física dañada por la desnutrición mantenida.

Contamos con diferentes psicólogos en tu provincia para tratar la parte conductual y la dismorfia de los pacientes con anorexia nerviosa, pero también te ofrecemos consultas con otros profesionales de la salud con nuestro seguro médico, una de las principales ventajas de Universalud a la hora de enfrentarse a enfermedades que requieren un abordaje multidisciplinar y coordinado, como es el caso de la anorexia o de una depresión nerviosa con somatizaciones que impidan al paciente alimentarse como debe.

Además, cuando es el paciente quien no desea comer por temor a perder un falso control o a engordar, hace falta reeducarle en lo que respecta a su relación con la comida, momento en el que incorporamos al equipo un nutricionista o un endocrino. No es cuestión de comer cierta cantidad y alcanzar un determinado peso, sino de alimentarse bien y asegurarse una correcta nutrición, para evitar caer en otro trastorno de la conducta alimentaria menos fácil de detectar que la anorexia: la bulimia nerviosa.

Anorexia y bulimia pueden presentarse de manera alterna, con lo que los pacientes a veces tienen un peso razonable y no se niegan en redondo a comer, lo que de nuevo puede despistar al entorno cercano, aunque no a nuestros psicólogos especializados en este tipo de trastornos de la conducta alimentaria.

La anorexia nerviosa es una enfermedad que puede conducir a la muerte o quedarse en una etapa complicada de la vida, dependiendo de la gravedad del caso y de cuándo se detecta. Precisa que el paciente desee colaborar en su curación, objetivo que se consigue tras meses o años de tratamiento multidisciplinar, porque el riesgo de recaída es elevado si no se va a la raíz del problema en cada paciente concreto.

Contar con un seguro médico como el de Universalud, que te permite elegir especialistas en tu provincia, es la forma menos costosa de lograr ofrecer esa terapia multidisciplinar en prolongada que necesitan los pacientes afectados por anorexia nerviosa. A la vez, podemos tratar otras enfermedades físicas o mentales que hayan sido la causa o la consecuencia de la anorexia.